...peregrina de su propia vida...

Hace un rato intenté recordar esos momentos del pasado en los que me sentía alegre, dichosa... simplemente feliz.
Ahora sólo soy una niña sin ilusión. Que le han robado la poca esperanza que tenía. Ya no entiendo nada, tanta hipocresía en cada palabra. Tú, escritor de mentiras, de frases ya analizadas para dejar corazones a trizas. Tú, pintor de retratos que marcan agonía, pinceladas de engaños... de falsas caricias.

¿dónde estan esos recuerdos?

Ahora sólo queda apenas una ráfaga de ese sentimiento, aunque cuando lo pienso me duelen hasta los dientes.Y otras veces me entra la risa. Ojala todo fuera una mentira... pero creo que cada uno tiene lo que tiene, y por ello cada vez que alguien me pregunta sobre el tema, intento regalarle una sonrisa, para intentar demostrar que, pese a todo, ahora las cosas van bien , o que no me afecta.
No busqueis palabras donde tan sólo puede haber silencio, no os aferreis a esa falsa idea que teneis sobre la vida, porque todo acaba...eso os lo aseguro.

Este será mi último suspiro... mañana, ya será tarde.
Recuerdo frases salidas de cierta persona, borrosamente interpretadas para darme aliento, quemo sentimientos impuros solo por no hacer daño... y ya me veis... me va como me va.
Sólo tú me hiciste peregrina de otros pasos. Sólo tú quisiste borrar mi pasado, abrigarme en la noche... para cerrar de nuevo los ojos, y soñar. Ahora, has vuelto de igual manera que el otro: como un puñal , para matar otra vez mis sueños, y arrancarme mis suspiros para que sólo queden sollozos de lamento.

Todas mis fantasías son amargas, pues al final se cierran de manera cruel, fiel a la realidad, y esas veces es cuando deseo olvidarme de todo cuanto tiene que ver con mi pasado. Sin embargo otras, moriría por conocer hasta el más mínimo detalle que existe, saber si existe un pequeño detalle que merezca la pena ser recordado... callar..., y vivir tranquila sólo con eso, sin hacer un simple comentario, conformandome con saber que hubo un tiempo en el que mis risas llenaban la calle, cuando las lagrimas no eran por miedo y temor, sino por una simple regañina... sinceramente no recuerdo momentos asi.

Ojalá te vayas...pero esta vez para siempre. Mientras yo sigo siendo peregrina, peregrina de mi vida, esa que busca sola en la noche... el fin de su existencia, y, el olvido.

-sadalsuud-.